Esta semana la oficina de patentes europea ha fallado sus premios a las mejores invenciones realizadas en el último año en Europa. El premio a la mejor investigación a ido al británico Christofer Toumazou, quien ha diseñado un chip que con un precio de unos 500 -600$ es capaz de secuenciar el ADN de una persona en su casa. El dispositivo en cuestión tiene un chip secuenciador de ADN que se centra en aquellas partes de nuestro genoma que son diferentes para cada ser humano (la mayor parte del genoma de la especie humana es igual para todos los individuos, sólo una pequeña fracción varía). El chip se conecta a cualquier PC a través de un puerto USB, y es capaz de secuenciar esta parte del genoma que nos diferencia a los unos de los otros.
Este dispositivo tiene un tremendo uso potencial en diagnóstico médico, ya que podría de un modo sencillo y barato permitir que un paciente en su casa sepa si posee genes que incrementan su riesgo de padecer alguna determinada patología. El funcionamiento del dispositivo es suficientemente sencillo para que una persona sin ningún tipo de entrenamiento o formación secuencie su genoma. Lo único que hay que hacer es tomar una muestra de saliva con un bastoncillo, o directamente escupir, en una parte de este dispositivo USB, conectarlo al ordenador y esperar.