Smart Monitor es el nombre de una compañía norteamericana que recientemente ha sacado al mercado un "reloj inteligente" orientado a pacientes epilépticos, especialmente niños. El reloj en cuestión tiene sensores para detectar las convulsiones asociadas con un ataque epiléptico. El reloj además está dotado de un GPS y coopera con el teléfono móvil del usuario para alertar a los cuidadores del niño/de la persona que lo lleva encima. Sus padres, familiares, o servicios sanitarios.
Cuando el reloj identifica un ataque epiléptico, emplea el teléfono móvil del usuario (por lo de ahora sólo soporta Android, en marzo de este año habrá también una versión para iPhone) para enviar mensajes de alerta a los contactos que se hayan programado en el reloj. En estos mensajes de alerta se incluyen las coordenadas GPS e incluso un mapa indicando la posición de la persona que está sufriendo el ataque.
El reloj también inicia una llamada telefónica al número de contacto especificado, y pone el teléfono en modo manos libres. Además, durante el ataque epiléptico registra los movimientos del paciente, información que puede ser empleada a posteriori con fines diagnósticos por personal médico.
El escenario de uso más habitual de este reloj sería aquel en el que un niño que padece epilepsia recibe el reloj de los padres, como un mecanismo para que los padres puedan socorrer al hijo si tiene un ataque cuando se encuentra, por ejemplo, jugando en el parque o, en general, fuera de casa y de la escuela.
Aquí os dejamos un video promocional de la compañía que está detrás de este reloj: