Un grupo de investigadores austriacos ha construido una prótesis de pierna que permite al usuario tener sensación de contacto con el suelo. El paciente, Wolfang Rangger, había perdido su pierna derecha en 2007. Este equipo de científicos austriacos ha construido una suela para la prótesis que tiene siete sensores de presión. Cada uno de estos sensores envía información de modo independiente a un micro controlador que recibe información relativa al contacto de la prótesis con el suelo.
El micro controlador analiza la entrada de los siete sensores y en base a eso envía una serie de comandos a unos estimuladores que producen vibraciones en la parte inferior del miembro del paciente. Estas vibraciones se producen cerca de terminaciones nerviosas activas del paciente. Para conseguir un correcto funcionamiento, fue necesario aolicar cirugía al paciente para reorganizar la posición de las terminaciones nerviosas activas en su miembro amputado.
El resultado final es que Wolfang Rangger es capaz de volver a "sentir" cuando pisa. Ahora sabe si está pisando hierba, arena o asfalto. Y puede adecuar su pisada de un modo óptimo para cada terreno. Por ejemplo, Wolfang afirma que ahora "ya no resbala al andar sobre hielo".
Esta es la segunda vez que se construye una prótesis que es capaz de proporcionar información sensorial al paciente. La primera fue a principios del año pasado, cuando se construyó una prótesis de brazo capaz de proporcionar información sensorial.