Un equipo médico ha implantado una mandíbula creada con una impresora 3D de titanio a un niño chino de 10 años. El niño intervenido fue diagnosticado hace un año con ameloblastoma, un tipo de tumor benigno muy poco frecuente, que afecta a la cavidad oral y suele desarrollarse alrededor de los dientes.
Tras la extirpación del tumor con una escisión quirúrgica, el menor sufrió una fractura mandibular que le causaba una deformación facial y además dificultaba su alimentación. Por ello los médicos apostaron por la tecnología 3D para implantarle una nueva mandíbula construida en aleación de titanio.
La intervención para colocar el implante duró alrededor de tres horas y se practicó el pasado enero en el Segundo Hospital de la Universidad de Shandong, aunque sus resultados se han hecho públicos tres meses después, tras comprobarse que el joven no ha tenido complicaciones ni efectos secundarios. Esta es la primera vez que se hace un procedimiento de este tipo en un menor de edad.