Durante el embarazo es bastante habitual que la futura mamá tenga que hacer visitas de modo regular al médico para supervisar la salud del feto. Un grupo de investigadores de la Universidad de California Irvine han creado un parche vestible capaz de monitorizar el electrocardiograma del feto y enviarlo vía Bluetooth a un terminal móvil, permitiendo así obtener información sobre la salud del feto en cualquier momento.
Estar procesando un electrocardiograma de alta resolución de modo continuo requiere bastante potencia de computación, y por tanto bastante consumo de potencia eléctrica, lo que redunda en la necesidad de o bien tener baterías grandes, o bien tener que recargar a menudo el dispositivo. Un aspecto muy novedoso del dispositivo es que explota el hecho de que los latidos son periódicos para analizar la señal, empleando los ciclos de computación en los momentos donde es más probable que haya un latido y ahorrando por tanto potencia eléctrica. Según los investigadores, el algoritmo es hasta 1000 veces más eficiente que otras alternativas similares.
Este algoritmo está patentado, y los investigadores están colaborando con la empresa Sensoriis para llevar el dispositivo al mercado.
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